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CENTROS COMERCIALES EN COLOMBIA LLEGAN A LA NUEVA NORMALIDAD

Actualmente el sector privado se enfrenta al reto de reabrir los activos inmobiliarios, y particularmente los centros comerciales, atendiendo todos los requerimientos y normativas asociados a la prevención de la pandemia y buscando ganar la confianza de los usuarios y visitantes aplicando las medidas de seguridad.

Desde este primero de septiembre, por ejemplo, 36 zonas de comidas de los almacenes Éxito y Carulla en Medellín, Envigado y Sabaneta comenzaron a recibir los clientes en sus instalaciones, tras obtener la aprobación de protocolos de bioseguridad por parte de las autoridades competentes.

 

Además, en todos los almacenes de esas marcas, se seguirá brindando la posibilidad de obtener las comidas preparadas para llevar y disfrutar en casa. “En Grupo Éxito estamos abriendo gradualmente las zonas de comidas preparadas ubicadas en nuestros almacenes, de acuerdo con las medidas establecidas por las autoridades de cada ciudad. Sabemos que nuestra oferta de comidas preparadas es una de las favoritas de los colombianos, por la calidad y el precio que ofrece y por su cercanía gracias a la ubicación de nuestras tiendas.

Estamos muy contentos de poder disponer de nuevo estas zonas para los clientes y lo estamos haciendo con la implementación de todas las medidas de bioseguridad para ofrecerles la confianza y tranquilidad que nuestros colaboradores y clientes necesitan y esperan”, expresó Nicolás Sierra, gerente del Negocio de Frescos de Grupo Éxito.

 

Entre las medidas aplicadas para la reapertura de las zonas de comidas el Éxito señaló que controla un aforo del 50 %, hace una regulación constante del número de comensales por mesa, implementó la marcación de distanciamiento en sillas, con el fin de disminuir el contacto entre personas.

 

Además, práctica la desinfección y limpieza de mesas y asientos, antes y después del uso de cada cliente e implementó la protección para los puestos de pago de comidas preparadas y panadería, con dispensadores de alcohol glicerinado en las cajas y las zonas de entrega para la limpieza de manos de los clientes y trabajadores, entre otros.

 

“En ciudades como Cali, Ibagué, Neiva, Fusa y Yopal ya hemos abierto varias zonas de comidas en nuestros almacenes y de esas experiencias hemos capiltalizado para las reaperturas de esta semana para entregar a los clientes la mejor experiencia”, concluyó Sierra.

Alejandro Alzate Velázquez, gerente Comercial de Pei Asset Management (vehículo de inversión inmobiliaria), explicó que más allá de la nueva dinámica operativa que estará ligada tanto al desarrollo de la emergencia sanitaria como a la interiorización por parte de los visitantes, compradores y trabajadores, de las medidas de autocuidado, la situación también invita a revisar las tendencias para los centros comerciales y a empezar a trabajar de la mano con los arrendatarios de esos espacios y aliados en encontrar la mejor manera de atender algunas nuevas dinámicas de parte de los consumidores.

 

Alzate mencionó que el aislamiento obligatorio ha invitado a todo el mundo a volverse más práctico. Más práctico en lo que consume, en cómo lo consume y en cómo lo compra. “Por lo menos por un tiempo, o incluso se puede posicionar como una tendencia de largo plazo, las personas empezarán a planear sus visitas priorizando la consecución de soluciones en la menor cantidad de tiempo, con la menor cantidad de reprocesos o escalas y la menor cantidad de contactos. Así, los centros comerciales deberán tender a priorizar la consolidación de soluciones para los consumidores. Soluciones, además, que impliquen una experiencia de valor agregado”, anotó.

Igualmente, indicó que los usuarios de ahora valoran encontrar en un mismo lugar, tanto su cita médica, como su banco, como el supermercado de su preferencia. Esto genera tráfico y vuelve la oferta comercial un complemento a la oferta de servicios y soluciones.

 

Añadió que poor muchos años se ha presentado al comercio electrónico como enemigo número uno de los centros comerciales. Y la situación actual ha motivado que mucha más gente fortalezca su capacidad de encontrar soluciones y productos a través de plataformas electrónicas. “Se pensaría entonces que este puede ser el momento de la profundización de esa tendencia. Sin embargo, creemos que existe una arista interesante en la cual es fundamental trabajar en conjunto con arrendatarios y comerciantes para identificar la mejor manera de ser aliados del comercio electrónico”, dijo.

Arkadia Centro Comercial se declaró desde el fin de semana listo para la apertura de nuevos espacios de acuerdo con la autorización del Gobierno y la alcaldía de Medellín. Es así como desade el lunes, 31 de agosto, inició la operación de la gran variedad de conceptos ubicados en la plazoleta de comidas y de los restaurantes a mantel, para un total de 31 comercios de gastronomía y este primero de septiembre arrancó actividades Smart Fit.

 

“Estamos muy felices de poder reactivar la totalidad de las tiendas, restaurantes y el gimnasio. Esto es necesario para la recuperación de la economía y para la conservación de empleos. En Arkadia Centro Comercial generamos alrededor de 1.500 empleos directos e indirectos. Estos meses han sido supremamente difíciles para el comercio y necesitamos del apoyo de todos para poder salir adelante. Estamos convencidos de que una reactivación de forma ordenada y controlada, con todas las medidas de bioseguridad es viable. Alineados con esto y con las nuevas aperturas, intensificamos los estrictos protocolos de bioseguridad que desde el inicio de la pandemia hemos implementado”, aseguró la gerente de Arkadia, Patricia Melo.

Entre las medidas de bioseguridad adicionales a las ya implementadas se destacan el retiro del 50 % de las mesas, y entre las disponibles hay una distancia de 2 metros entre cada una.

 

Se instaló señalización para acceso, circulación, sitios de espera y salida en la zona de comidas, para garantizar el distanciamiento social y evitar conglomeraciones. Hay personal disponible para orientar a quienes lo requieran y para controlar el aforo. Se hace entrega de bolsas de papel al ingreso de la plazoleta de comidas, para guardar el tapabocas mientras se consumen los alimentos.

 

Fuente: El Colombiano.