Ya podemos hablar de retail pre y post 5G. Ya está sucediendo en casi 1.400 ciudades alrededor del mundo, con predominio de Asia, donde comenzó su despliegue, en Corea del Sur, en 2019. Actualmente, China lidera la carrera 5G, con casi 350 ciudades en funcionamiento y próximamente en Latinoamérica.
La 5G se convertirá en una realidad mucho antes de lo que muchos imaginaban, rediseñando muchos sectores y actividades, desde la telemedicina hasta las comunicaciones, pasando por la agricultura, la educación, los medios de comunicación, los pagos digitales, la logística, el transporte y, en particular, por los impactos en el consumo y el comercio minorista.
Pero todo girará en torno a los cambios que precipitará el impacto en los omni-consumidores-ciudadanos 5G que surgirá de la difusión de la oferta de esta tecnología, aunque esté condicionada a la velocidad de uso para el acceso a los equipos que permite su uso, lo que requerirá una cierta cantidad de tiempo.
Para ejecutivos, emprendedores y profesionales de las más diversas áreas, es el momento de repensar estos impactos y evaluar los aspectos positivos y negativos de sus actividades.
Aspectos técnicos.
Solo en términos técnicos, la transformación se producirá a través del impacto en cuatro aspectos importantes:
- Mayor velocidad de transmisión: mayor velocidad, ya que 5G promete ser de 50 a 100 veces más rápido que 4G y puede alcanzar velocidades de descarga de hasta 10 GB / segundo. Con esto, será posible descargar una película completa en menos de 10 segundos, lo que hoy toma hasta 10 minutos;
- Baja latencia: tiempo mínimo entre estímulo y respuesta en redes de telecomunicaciones;
- Mayor densidad de conexiones evaluada por el número de dispositivos conectados en la misma área;
- Mayor eficiencia energética de los equipos, con beneficios en economía y sostenibilidad, ya que se estima que el 5G consume un 90% menos de energía que el 4G.
Poder transformador.
El poder transformador del despliegue de 5G en las esferas de consumo y venta minorista debe subdividirse en cuatro vectores principales: el primero, el más básico, involucra al mercado que se creará para el acceso a los teléfonos celulares y los equipos electrónicos más diversos, especialmente todo lo que lo hará.
Implican el crecimiento del mercado para el uso del IoT (Internet de las cosas), con productos que se demandarán con la tecnología incorporada. Esto precipitará una creciente obsolescencia de lo que no es compatible con 5G.
El segundo, desde el punto de vista del consumidor, involucra todos los recursos que se pueden utilizar para expandir y diferenciar la experiencia, permitiendo, por ejemplo, que la Realidad Virtual o la Realidad Aumentada puedan ser parte de la experiencia de elección, compra y pago de los clientes. productos por comercio electrónico o tiendas.
De la misma manera que estimula y amplía el uso y posibilidades de alternativas, como el comercio en vivo y el marketing en vivo, crea posibilidades infinitas y relevantes para exponer la dimensión de la emoción en las transacciones comerciales en las más diversas categorías de productos.
Un ejemplo de estas posibilidades se presentó de manera inédita en el Latam Retail Show 2018 y en el Omnistory Ciclo Senna , cuando los participantes pudieron visitar un museo virtual en honor al piloto, pudiendo "tocar" los productos, comprar y paga dentro del entorno de realidad virtual, creando una experiencia inmersiva única.
El tercero implica la expansión de los ambientes comerciales, multiplicando y diversificando los espacios, incluyendo las propias tiendas, incluyendo la creación y expansión de formatos que operan sin empleados, haciendo la vida más fácil y cómoda para los consumidores.
Muchos formatos innovadores sin empleados surgieron en su primera generación, pero ahora evolucionarán en sus conceptos, instalaciones, conveniencia y proximidad que brindará 5G.
La cuarta dimensión involucra las transformaciones que se precipitarán en la estrategia y gestión empresarial, a través de la incorporación de herramientas y recursos, que harán todo el proceso más eficiente, más rápido y con mejor retorno de la inversión.
Todo lo que hemos visto y seguido en China, por ejemplo, ligado al seguimiento del comportamiento de segmentos, nichos e incluso a la personalización de la oferta de productos y servicios, potenciada por la velocidad que brinda el 5G, cambiará radicalmente la forma en que el retail puede actuar.
Responsabilidad y bonificaciones
Si el potencial transformador positivo de las bonificaciones de la implementación del 5G en los negocios y en la vida del consumo y el retail es cierto, es necesario recordar que también tendremos las cargas relevantes que no se pueden minimizar.
Primero, las inversiones que serán necesarias para adecuar la realidad actual a la emergente en sus cuatro principales vectores, so pena de ser atropellados por la competencia que se multiplicará y diversificará.
Al igual que con cada nueva tecnología que se implementa, existe una competencia exponencial para los nuevos participantes de tecnología pura , que se vuelven relevantes rápidamente y con acceso a recursos financieros facilitados por el atractivo de la tecnología emergente. Vea, por ejemplo, cómo las fintechs están haciendo que el entorno financiero sea mucho más competitivo.
Tampoco debe olvidarse el riesgo potencial involucrado en los problemas de ciberseguridad debido al uso incorrecto de los recursos mejorados por 5G y sus implicaciones para los problemas relacionados con la confidencialidad y la restricción del uso de datos.
Por otro lado, considerar toda la transformación que se requerirá en los profesionales que se involucrarán con la tecnología 5G y sus innumerables recursos, alternativas y posibilidades que requerirán adaptaciones y recursos relevantes y rápidos para incorporar lo positivo.
Si bien el 5G en sí mismo facilitará y acelerará en gran medida las alternativas en educación y capacitación, debe haber mucho enfoque y trabajo que involucre los cambios que deberán realizarse en los equipos de las empresas para preparar, incorporar y utilizar los nuevos recursos que serán Hecho disponible.
No hay duda de que podemos, de hecho, separar el retail y el consumo pre y post 5G por lo que se abre perspectiva y, como todo lo que implica tecnología y transformación digital, es hora de movilizar la atención y el foco para anticipar los movimientos que serán irreversible.
Después de todo, solo quedan nueve meses, una gestación, para que las principales ciudades brasileñas tengan 5G desplegado a escala masiva con sus muchas bonificaciones y alguna responsabilidad.
Fuente: Mercado & Consumo.
