La última vez que Barcelona y Granada se vieron las caras en La Liga española, el modesto equipo granadino logró sacarle un empate al gigante catalán. Esa hazaña estuvo enmarcada por un pequeño triunfo para Colombia que, quizás, pasó desapercibido para los cronistas deportivos, pero no para los económicos.
En la camiseta del Granada apareció estampado el logotipo de Platzi, una plataforma colombiana de educación orientada a los profesionales en tecnología, que ahora será vista por los 487.000 televidentes que, según Kantar Media, arrastra en promedio cada partido de La Liga española.
Además, solo los asistentes al estadio Los Cármenes, en donde el Granada juega de local, ya le garantizan a la plataforma colombiana rotar por las retinas de los casi 17.000 espectadores que normalmente asisten a los juegos.
¿Por qué tanta bulla?
Quien esté leyendo este texto sin conocer a Platzi podrá preguntarse: ¿qué importa su aparición en el ámbito internacional? Pues bien, resulta que se trata de un emprendimiento colombiano con alto potencial de crecimiento, de esos que hoy día llaman “startup”.
Fue creada en 2014 por Freddy Vega y Christian Van Der Henst (Guatemala). Su propósito es ayudarles a las compañías tecnológicas con la formación de sus trabajadores. En lo que lleva de funcionamiento, según sus fundadores, ha logrado atraer a 2,5 millones de estudiantes, quienes han dado vida a más de 40 startups.
Recientemente, los creadores de Platzi lograron que varios inversionistas colocaran US$60 millones en su proyecto, dinero que se usará para ofrecer sus servicios en portugués e inglés, lenguas que se sumarán a los programas en español que ya están disponibles en su plataforma.
El hecho de que su marca esté apareciendo en certámenes extranjeros indica que su público no está únicamente en Colombia y que aspira a una cobertura global, tal como lo expuso Carlos Fernando Villa, consultor en marketing y profesor universitario.
Por esa misma línea va Rappi, la única plataforma 100% colombiana que es considerada un unicornio; esto quiere decir que su valor como empresa supera los mil millones de dólares.
A la velocidad de Fórmula 1
Como un bólido de carreras, Rappi ha corrido a toda velocidad desde su fundación y sus creadores pasaron de regalar donas a quienes descargaran su aplicación, a poner su logotipo en el equipo McLaren Racing, de la Fórmula 1, el pasado 14 de noviembre durante el Gran Premio de Brasil.
Considerado como el certamen de motores más prestigioso del mundo, los patrocinios y el mercadeo alrededor de estas competencias mueven miles de millones de dólares en un año. Sin embargo, no hay certeza frente al monto exacto, pues los organizadores suelen ser bastante herméticos con esas finanzas.
Solo basta con revisar las escuderías que compiten allí (Ferrari, Aston Martin, Mercedes y Alfa Romeo) para comprender que meterse en ese universo permite untarse de la opulencia que simbolizan todos esos gigantes de la industria automotor. Así mismo, permite llegarle a los cerca de 87,4 millones de televidentes que, según los organizadores, se registran por cada gran premio.
Rappi es la tercera marca colombiana que pone su nombre en la Fórmula 1, pues ya lo habían hecho Jeans Caribú y Café de Colombia en la década de los 80 del siglo pasado, pero es la primera de base tecnológica en conseguirlo.
La intención de la plataforma, de acuerdo con sus responsables ejecutivos, era promocionar a Turbo Fresh, servicio enfocado en la entrega de abarrotes en menos de diez 10 minutos, que compite con la oferta de otros jugadores como Merqueo y Jokr.
¿Qué significan estas vitrinas?
“Tanto Platzi como Rappi ya cuentan con presencia en varios países y han dejado ver claramente la intención de expandir el cubrimiento actual”, señaló el profesor Villa al interpretar lo que hay detrás de esas estrategias publicitarias.
“El hecho de hacerse sentir en certámenes o competencias internacionales indica que esa intención está latente y que cuentan con músculo financiero para hacerlo”, añadió el experto al resaltar que los jóvenes son el grupo objetivo de ambas. En línea con el alto consumo de tecnología entre esa generación, Carlos Andrés Arango, docente de la Universidad Jorge Tadeo Lozano y experto en branding, afirmó que, al poner su marca en equipos de fútbol, las empresas buscan un beneficio a futuro.
“Todas las apariciones que ellos hagan como patrocinadores de estos equipos tiene que ver con la publicación posterior que van a tener en los videojuegos”, comentó.
“Fifa —agregó— es uno de los juegos que revela cifras más exhorbitantes. Por ejemplo, más de dos billones de partidos jugados para el lanzamiento de la versión 2022. Cuando Platzi pauta en un equipo como el Granada, que no tiene un buen rendimiento, solamente lo hace como estrategia para aparecer en el videojuego”.
Fuente: El Colombiano.
