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ALFA, CERáMICAS ITALIA Y EUROCERáMICA: LA DURA PELEA CON CORONA

La Vivienda de Interés Social, VIS, aquella que cuyo valor máximo es $ 175.500 millones para este 2024, fue proyectada por el gobierno como una vivienda con las condiciones básicas para ser habitadas, del nuevo propietario dependen sus acabados.

En el caso de la vivienda VIS los apartamentos son entregados por los constructores en obra gris para que cada uno lo termine: cielo raso, cocina, aparatos de baño; las tuberías a la vista y los pisos se entregan solo nivelados de cemento, sin enchape. Y es allí donde empieza el negocio de las empresas que fabrican cerámica. Son tres Alfagres, San Lorenzo y Cerámica Italia las que le compiten a la líder del mercado,  Colceramicas del Grupo Corona. 

 

Alfagres con su baldosa Alfa, la creación de la familia Boggio

 

Alfagres, fue fundada por Pier Carlo Boggio, un italiano que nació en Torino, Italia en 1926, y llegó a Colombia con 26 años en búsqueda de oportunidades ante una tierra natal devastada por la segunda guerra mundial.

Rápidamente se vinculó a la industria de la construcción, y acompañó a José Gómez Pinzón en la fundación de Ladrillera Santafé, empresa donde se desempeñó como su Gerente General por varias décadas.

 

En 1955, decidió independizarse y dedicarse al potencial que veía en la producción de revestimientos y acabados para la construcción, fundó Alfagres en compañía de algunos socios como Ospinas y Compañía. Con los años, Alfagres se fue expandiendo hasta formar el Grupo Empresarial Alfa, que en 1984 ya exportaba parte de su producción a Estados Unidos y desde allí a otros mercados. A finales de 2013 era controlante de varias compañías como: Alfagres, Alfacer del Caribe, Baldosines Alfa (Ecuador), Baldosines Torino S.A, Flor Gres, Pisotrans, Sociedad Minera de Pantoja y Opa International Corporation.

 

El relevo gerencial se dio en octubre de 2015, cuando su hijo el ingeniero Carlos Alberto Boggio, con maestría en administración de negocios, asumió la gerencia del grupo tras haber pertenecido con anterioridad a la junta de Alfagres. 

Realizó una primera alianza con la alemana Henkel para sumarle a la oferta pegantes y adhesivos, pero no lograron despegar y los retrasos en la construcción de la planta en la Zona Franca Permanente La Cayena de Barranquilla y las importaciones de materiales de la China golpearon a Alfagres S.A. y Alfacer del Caribe S.A. hasta que en 2019 debieron acogerse a la ley de reorganización económica. El fundador don Pier Paolo Boggio había muerto el año anterior. Finalmente, en el 2021, superaron la crisis y en febrero de 2022, Alfagres en Reorganización absorbió a Alfacer del Caribe.

 

El difícil momento lo asumió Emilio Álvarez Sánchez como gerente, quien estaba a la cabeza desde 2013, con el respaldo de la junta directiva en la que participan sus hermanos Carlos Alberto y Elisa Boggio Dávila.

La planta de producción principal está en Soacha y cuentan con más de 500 distribuidores con presencia internacional en alrededor de 33 países. La esposa de Carlos Alberto, Ana María Matallana dirige desde 2009, la Fundación La Cayena del Grupo Alfagres.

 

Con la arcilla de Norte de Santander Gustavo Ararat fundó Cerámica Italia

 

Hace ya cuarenta años, en 1983, el empresario Gustavo Ararat Negrón supo aprovechar las minas de arcilla de Norte de Santander y fundó en Cúcuta la fábrica de Cerámica Italia. Hoy exporta a diez países.

 

Con un espíritu binacional, las ventas a Venezuela representaban el 30% de los ingresos, las cuales se vieron duramente afectadas por la crisis del 2015 que su propietario supo sortear. Su vocación exportadora les abrió nuevos horizontes aunque más exigentes, por lo que se propusieron mejorar la calidad de los productos y en el 2022, realizaron una inversión de $ 30.000 millones en impresión digital y tecnología italiana.

David Ararat tomó las riendas de la compañía después de haber estado vinculado 26 años y tras la muerte trágica de su padre en un intento de secuestro en Cúcuta. Se ha propuesto  consolidarse en Estados Unidos y pasar de vender cerámica para baños a entregarle al cliente el baño construido y listo para instalar, para ello prepara la construcción de una nueva planta a las afueras de Cúcuta en la que invertirán $ 29.000 millones a la espera estar lista para el 2030.

 

Eurocerámica la presencia del grupo mexicano Lamosa en Colombia

 

La familia mexicana Lamosa llegó a Colombia en 2016 a través de la adquisición  Cerámica San Lorenzo, sin embargo su empresa la más reconocida es Eurocerámica, la cual adquirieron cuatro años después y aprovecharon las sinergias de ambas empresas para la fabricación y comercialización de pisos, paredes y porcelana sanitaria.

Los orígenes de Grupo Lamosa datan con la fundación de una pequeña fábrica de ladrillos ubicada en Monterrey, Nuevo León, en 1890, por un grupo de accionistas de ascendencia norteamericana. Una ladrillera que se convirtió en la semilla de Lamosa cuando en 1929, apremiados por la gran depresión, se la vendieron a los ingenieros mexicanos Bernardo Elosúa Farías (yerno del fundador de Cervecería Cuauhtémoc) y su primo Viviano Valdés, quienes le cambiaron el nombre a Ladrillera Monterrey, y decidieron diversificar su producción para ser pionera en la producción mexicana de azulejos, pisos y barro blocks; para 1933, ya era el mayor fabricante de cerámica en México.

 

Luego de más de 40 años a cargo, en 1973, Bernardo Elosúa y Viviano Valdés se retiraron de la administración directa, dejando como director general a Bernardo Elosúa Muguerza, hijo de Elosúa Farias, quién creció y consolidó la empresa en todas su áreas. Un año antes de su muerte en 1993, su sobrino Federico Toussaint Elosúa asumió la dirección general, llegó cuando la empresa vendía USD 80 millones y hoy vende USD 1.800 millones al año, convirtiendo el Grupo Lamosa en uno de los más grandes fabricantes mundiales de cerámica, con exportaciones a 50 países gracias a su exitosa estrategia de crecer a través de la adquisición de empresas.

Una de las grandes compras que hizo fue en el 2007 cuando se quedó con Porcelanite de la cual era dueña Carlos Slim para fortalecer la línea de adhesivos y los revestimientos. Casi diez años después, en 2016, adquirieron Cerámica San Lorenzo al fabricante belga Etex con presencia no solo en Bogotá sino en Argentina, Chile y Perú con lo cual incrementó su capacidad de producción del negocio de revestimientos en un 40 %.

 

Estas tres empresas familiares, a pesar de que el Grupo Lamosa cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores desde 1951, están entre las 1.000 empresas más grandes de Colombianas y aunque lejos de la dueña del mercado en Colombia en cuanto a ventas, el Grupo Corona con Colcerámica, cada una superó en el año 2022 las utilidades de Colcerámica, y la que menos, por casi tres veces.

Familia Echavarría Olózaga construyó un emporio llamado Corona.

 

La historia de Cerámica Corona se remonta al año 1881, cuando fue fundada bajo el nombre de Compañía Cerámica Antioqueña en Caldas, Colombia, por un grupo de emprendedores liderados por Teodomiro Llano Botero, Victoriano Restrepo Uribe y Reinhold Paschke. En sus inicios, la empresa se dedicaba principalmente a la producción de loza y vidrio, con una modesta operación impulsada por una rueda de madera accionada por la corriente de la quebrada La Valeria, que fue el primer motor para su funcionamiento.

 

A lo largo de las primeras décadas, desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX, Cerámica Corona enfrentó diversos desafíos, pasando por tres grupos de propietarios diferentes y experimentando cambios de razón social en dos ocasiones. No obstante, en 1935, la empresa experimentó un cambio trascendental cuando la familia Echavarría Olózaga adquirió el control total de la compañía. Con la visión y liderazgo de Gabriel Echavarría Misas, Cerámica Corona inició un proceso de modernización que la llevó a un nuevo nivel de desarrollo.

Durante las décadas de 1960 y 1970, Cerámica Corona consolidó su posición como una de las empresas líderes en la industria cerámica colombiana. La compañía diversificó su oferta de productos, incursionando en nuevos segmentos como la producción de sanitarios, aislantes eléctricos, materiales refractarios, así como grifos y válvulas. Este período de expansión y diversificación fue fundamental para establecer a Cerámica Corona como un referente de calidad e innovación en el mercado.

 

En los años posteriores, Cerámica Corona continuó su crecimiento, expandiendo su presencia tanto en el mercado nacional como en el internacional. Incursionó en el sector de hipermercados y estableció alianzas estratégicas, desarrollando la marca Homecenter en colaboración con Sodimac. Además, la empresa expandió sus operaciones hacia nuevos territorios, estableciendo plantas de manufactura en México, Estados Unidos y Centroamérica.

En el siglo XXI, Cerámica Corona ha mantenido su expansión global, contando actualmente con 21 plantas de manufactura en Colombia, 2 en Estados Unidos, 3 en Centroamérica y 3 en México, así como también con 39 puntos de venta Centro Corona en Colombia, 5 puntos de venta Solutions en Centroamérica y una oficina de suministros globales en China. Esta presencia global ha permitido a la empresa consolidarse como una multinacional con más de 140 años de historia y un sólido posicionamiento en el mercado cerámico internacional.

 

En cuanto a su desempeño financiero, para el año 2022, según datos del diario La República, Cerámica Corona registró ventas por 4 billones de pesos, lo que evidencia su relevancia y solidez en el panorama empresarial colombiano e internacional. En resumen, Cerámica Corona es una empresa con una rica historia y una destacada trayectoria de crecimiento y éxito, que continúa siendo un referente en el mercado cerámico global.

 

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Fuente: las 2 Orillas