La apertura del local número 1.000 de Droguerías y Farmacias Cruz Verde supone un punto de inflexión para el retail farmacéutico colombiano. No se trata solo de un nuevo punto de venta; es la cristalización de un ciclo de expansión que, en poco más de una década, ha convertido a la filial de Femsa Salud en la referencia obligada de un mercado cada vez más competitivo y regulado.
Con la nueva droguería, Cruz Verde refuerza el compromiso con la generación de empleo digno: de los diez mil colaboradores que hoy integran la operación nacional, siete de cada diez son mujeres, y la compañía ha sido certificada en Colombia con el sello Equipares, que avala sus políticas de igualdad salarial y promoción interna.
Esta compañía perteneciente a la mexicana Femsa Salud, la plataforma que agrupa a Cruz Verde en Chile, Colombia y Ecuador, opera 4.767 puntos de venta en el continente, lo que la convierte en la red de farmacias de mayor capilaridad administrada por un solo holding en América Latina.
Dentro de ese universo, Chile aporta algo más de setecientas tiendas, mientras que Colombia —con la inauguración de la tienda 1.000— consolida la mayor red farmacéutica del país y cubre setenta y siete municipios con un portafolio que abarca retail, dispensación institucional, farmacias intrahospitalarias, distribución mayorista y atención especializada en IPS Medicarte.
El desempeño de 2024 confirma la solidez de la estrategia. Cruz Verde cerró el año con ingresos por valor de $ 5,5 billones y un avance del 7% frente a 2023, lo que la ubica como la séptima marca de retail más grande de Colombia y la primera en su categoría farmacéutica, de acuerdo con el Mapa Nacional de Retail 2025 de Mall & Retail.
Tres razones explican el resultado: la automatización del nuevo centro de distribución en Cota, que incorpora tecnología pick-to-light y permite despachar hasta cuatrocientas cincuenta mil unidades diarias con precisión de noventa y nueve coma nueve por ciento; la expansión de su ecosistema omnicanal —app móvil, call center, marketplace y vitrinas físicas interconectadas— y la profundización de alianzas con EPS e IPS que garantizan contratos de largo plazo en dispensación de medicamentos de alto costo.
El entorno corporativo también juega a favor. En el primer trimestre de 2025, la división Salud de Femsa reportó un incremento anual del 21% por ciento en ingresos y del 27,4% en utilidad operativa, desempeño que le otorga márgenes para acelerar la apertura de tiendas y robustecer inventarios en segmentos de cuidado personal de alto margen.
Los planes para 2025 proyectan un crecimiento de doble dígito. La empresa aspira a llegar a mil cincuenta puntos en Colombia hacia diciembre y a completar ciento veinte clínicas intrahospitalarias, reforzando su presencia en ciudades intermedias donde el acceso a medicamentos especializados sigue siendo limitado. En materia ambiental, Cruz Verde integrará al menos el 20% de sus tiendas en un programa de logística inversa para recolección de residuos posconsumo y espera cubrir el 100% del consumo eléctrico con fuentes renovables certificadas en los próximos dos años, siguiendo la línea trazada por la matriz, que ya opera seiscientos cincuenta y tres sitios con energías limpias.
Bajo este aspecto, la tienda mil es mucho más que un hito simbólico. Es la prueba tangible de cómo una cadena de farmacias puede moverse con la velocidad de una empresa de proximidad y, al mismo tiempo, con la complejidad clínica de un dispensador hospitalario.
El modelo de Cruz Verde demuestra que la escala, cuando se apoya en tecnologías de automatización, talento diverso y una estrategia omnicanal genuina, se traduce en disponibilidad de medicamentos, mejores precios y servicios de salud accesibles a gran parte de la población.
Su proyección para 2025 sugiere que el liderazgo en el retail farmacéutico no dependerá únicamente del número de tiendas, sino de la capacidad para integrar la experiencia clínica, digital y logística en un solo flujo de valor.
Fuente: Mall & Retail.