Las personas consumen cosas diferentes, de distintas maneras y por diferentes motivos. Comprender que todo cambia constantemente, a una velocidad vertiginosa, es esencial para quien gestiona un centro comercial. Un buen ejemplo de ello es el sector alimentario. Desde hace tiempo, venimos demostrando que restaurantes, cafeterías, chocolaterías, heladerías y bares están ganando cuota de mercado en el panorama de los centros comerciales del país. Incluso he repetido, con cierta insistencia, que la comida es la nueva moda.
Sin embargo, esto no significa que comer fuera sea inmune al cambio . Estar atento a la evolución del sector, impulsada en parte por la economía, pero también por las nuevas tecnologías y los nuevos hábitos de consumo, puede marcar una gran diferencia.
Comer fuera pesa más en tu bolsillo.
Analicemos las cifras. En 2024, los brasileños gastaron casi R$221 mil millones en servicios de alimentación. Sin embargo, el crecimiento con respecto al año anterior se debió a un aumento del 4% en el ticket promedio. El número de visitas disminuyó un 3% en comparación con 2023. En otras palabras, a pesar de gastar más, la gente salió a comer fuera con menos frecuencia.
Un presupuesto ajustado es una de las principales causas. Datos recientes, publicados por Gouvêa Inteligência, muestran que el 31 % de los brasileños considera que el costo de comer fuera ha aumentado significativamente; el 30 % afirma que ha habido un fuerte aumento en el precio de la comida y las bebidas en los supermercados, lo que presiona su presupuesto; y el 23 % admite que sus ingresos son menores, lo que afecta sus decisiones de comida y bebida.
Conclusión: El costo de vida, la inflación, la deuda y otros problemas están afectando las operaciones alimentarias de norte a sur del país. Una de las consecuencias es el aumento de la costumbre de consumir loncheras en el trabajo. El porcentaje de encuestados que lo hace regularmente alcanza el 48%, con un 32% que lleva comida preparada a casa y un 16% que compra comida preparada.
En el sector de servicios de alimentación, el 17% de los ingresos proviene del reparto a domicilio.
Los bolsillos vacíos no son la única razón de la caída del tráfico en las operaciones de restauración. El servicio a domicilio sigue creciendo rápidamente y, el año pasado, alcanzó el 17 % del gasto total en el sector de la restauración brasileño, con la asombrosa cifra de 1700 millones de transacciones realizadas en plataformas nacionales. El mercado cobrará aún más impulso con la llegada de nuevos competidores, como la empresa china Meituan y el regreso de 99Food, por mencionar solo dos ejemplos.
La salud y el GLP-1 cambian los hábitos
Finalmente, se están consolidando nuevos hábitos. Estudios presentados el mes pasado durante Connection, un evento organizado por Gouvea Foodservice, revelaron que las personas son muy sensibles a la salud . Comer bien es el deseo del 43 % de los brasileños, de los cuales el 38 % está dispuesto a dar mayor preferencia a la comida casera. Por otro lado, solo el 10 % de los brasileños desea comer fuera con más frecuencia.
Como si todo fuera poco, la industria de servicios de comida ya está sientiendo los efectos de la difusión de los medicamentos en GLP-1 (leasé Ozempic, Mounjaro y similares) hasta el punto de que el tema ha llegado a la etapa de la reunion actual de la NRA (National Restaurant Association) asociaciÓn que reune a la industria de servicios de comida en Estados Unidos.
Al menos el 12% de los estadounidenses han consumido esta droga en algún momento. ¿Sabe cuál es la relación entre el GLP-1 y las operaciones de alimentos y bebidas? Los estudios demuestran que los supresores del apetito y los inductores de saciedad sí influyen en el consumo, reduciendo el gasto, especialmente en productos más calóricos, como refrigerios, pasteles, galletas y helados.
La alimentación seguirá siendo muy importante para los centros comerciales
Tras tantas advertencias, cabe una advertencia: la gente no dejará de comer en los centros comerciales. Sin embargo, es importante monitorear atentamente los movimientos del mercado para adaptar la oferta de centros comerciales, tanto en cantidad como en tipo de operaciones. Al fin y al cabo, más vale prevenir que curar.
Diversificar la oferta gastronómica, con diferentes precios y sabores, priorizar la salud e invertir en dosis generosas de dopamina, ya sea en forma de experiencias o productos, son algunas de las posibles maneras. Combinar comida, bebida, socialización y alegría también puede ser una buena idea.
El cambio es la única constante. Esta cita del filósofo griego Heráclito de Éfeso, a pesar de tener más de 2500 años de antigüedad, parece más relevante que nunca. Demuestra que el mundo está en constante evolución y gira cada vez más rápido.
Lo mismo debería aplicarse a la gestión de la combinación de inquilinos en los centros comerciales: estar atentos a las oportunidades y amenazas que surgen a diario. Los centros comerciales son organismos vivos y deben adaptarse continuamente al entorno externo y a los nuevos comportamientos de los consumidores.
Fuente: Luiz Alberto Marinho para Mercado & Consumo.
